Simeone eligió una alineación ante el Real Madrid pensando en la Copa | Fútbol | Deportado

La Copa del Rey se sumó a la alineación de Diego Pablo Simeone en el partido que supuso el último balón del Atlético para mantenerse en la tabla. En cuanto a forma, los suplentes de Lino y Pablo Barrios chirriaron y también delataron que el técnico argentino tenía más en la cabeza el duelo tapado del próximo milagro ante el Atlético en el Metropolitano. Un cabezazo de Marcos Llorente descendiendo del dios de la empatía con el Atlético, pero al final tuvo la sensación de que los rojiblancos han desperdiciado la oportunidad de derrotar a un Madrid muy mermado por las lesiones. Una victoria habría permitido al Atlético situarse a seis puntos en Liga.

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Andriy Lunin, Nacho, Dani Carvajal, Lucas Vázquez, Ferland Mendy, Federico Valverde, Jude Bellingham (Dani Ceballos, min. 88), Camavinga, Kroos, Brahim Diaz (Joselu, min. 70) y Rodrygo (Modric, min. 76)

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Atlético

Oblak, Mario Hermoso, Witsel, Savic, Marcos Llorente, Rodrigo Riquelme (Nahuel Molina, min. 45), Koke (Correa, min. 67), Saúl (Samuel Lino, min. 60), De Paul (Pablo Barrios Rivas, min. . .61), Griezmann y Morata (Depay, min. 60)

goles 1-0 minuto 19: Brahim Díaz. 1-1 minuto. 93: Marcos Llorente.

Árbitro José María Sánchez Martínez.

Tarjetas amarillas Saúl (min. 37), Mario Hermoso (min. 38), Pablo Barrios Rivas (min. 84) y Depay (min. 95)

No fue casualidad que el gol del Atlético fuera de cabeza. Durante todo el partido hubo más diversión. Lo que hizo Llorente no fue más que constatar que con un intendente ofensivo desde el inicio el equipo de Simeone podría haber dado un golpe en el campo. “Es un punto. El equipo lo llevó hasta el final. Es empático, creo merecido. Para mí fue un partido raro. En todas nuestras situaciones de gol, marcamos el gol, fuimos mejores que nosotros, pero tuvimos más situaciones que nosotros que ellos. La segunda parte fue larga y con pocas situaciones. Ni estuvo ni busca los partidos vibrantes que fueron los últimos”, analizó Simeone.

En ninguna parte el Atlético está derrotado por un equipo que todavía aspira a decidir algo en La Liga. No es que el Madrid juegue con Carvajal y Nacho en centrales, ni el disparo de última hora de Vinicius burlado a Simeone y sus futbolistas para protagonizar un ataque autoritario antes de que el Madrid se escape tantas veces y tantos centímetros en su defensa. El Atlético se fue arriba codificado, con tremendas dificultades para armar el partido. Se rompió el balón Riquelme-Saúl, pateado por Lucas Vázquez y Brahim Díaz en defensa y plano con la pelota. “No está de más salir siempre de casa”, prosiguió Simeone, que insistió: “Creo que fue un grupo feliz de los dos equipos. No fue una fiesta vibrante. Si tuvieras más cuidado, nunca encontrarías ningún error. La segunda vez fue sencilla. Nos vieron, vimos el gol de Griezmann y simplemente nos anularon el gol, porque Saúl era el portero del portero, y el gol que nuestro dios es la empatía que vale la pena seguir jugando en LaLiga”, valoró.

El Madrid ya había desperdiciado tres veces en portería, cuando el primer balón que tocó Griezmann fue un pase filtrado a Morata con el que el nuevo intentó a Lunin y dejó que la debilidad defensiva de su rival exigiera un Atlético más dominante. Sucede que hasta la aparición en el Atlético la tibieza atrás. Inmediatamente salí del balcón al frente del área. Saúl le dejó sin querer pared a Lucas Vázquez y en el centro de esa zaga, Koke hizo trampa con Brahim Díaz para que este fusilara a Oblak. Hubo una falla de tensión competitiva y un oficio alarmante en el juego de gol que descabalgava definitivamente al Atlético de la Pelea por el campeonato. Un cabezazo de Witsel que dudó a Lunin en una buena parada, otro de Savic que quedó a media palma y un testamento de Saúl que giró mal el cuello confirmando que el Atlético tenía el partido en el juego aéreo.

Entonces, tuve que reaccionar ante Simeone antes de que lo viera. Lucas Vázquez y Brahim Díaz siguen haciendo mucha pupa. A ti te toca cambiar al entrenador del Atlético por juego y posiciones. Ordenó un 4-4-2, con Saúl por delante de Hermoso y Riquelme por delante de Molina. Estabilizó al Atlético en la marcha final de la segunda parte y salió con más mandato en la segunda. En el primer saque de la báscula, Savic marcó de cabeza, pero el asistente apreció que Saúl estaba en partido. Griezman se adelantó en una fila de espuela, pero el gol llegó, como no podía ser de otra manera, llegar. Para los dos se los pidieron en gran parte”, abundó el técnico, quien consideró que los cambios incluidos “fueron muy bien en el segundo tiempo”. “Sin duda intentaremos darle vitalidad en el medio, volteando a recuperar a Llorente en el medio centro, con Barrios que tiene más recorrido, con Correa atrás, Lino en el medio, con Memphis, Morata ha hecho un Mucho esfuerzo, e intentaremos buscar el empate hasta el final. El mérito es que buscamos el gol para poder concentrarnos en el marcador. Un penalti que no podemos hacer antes, porque el partido no fue tan malo como para haber ganado”, concluyó Simeone.

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By Bixintxo Armendáriz Campos

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