La Fórmula 1 llegará a Madrid a partir de 2026, nada menos que 45 años después de la última vez que el Certamen visitó el Jarama (1981). El anuncio oficial se hará meses después por una cosa u otra, pero este martes a partir de las 10.30 horas se celebrará en Ifema un acto con la presencia de Stefano Domenicali, presidente y director general de la Fórmula 1; Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad, y José Luis Martínez-Almeida, alcalde de la capital. En un primer momento, la oficialización del acto previsto antes de las últimas elecciones generales, tuvo como resultado aplazar la confirmación de un mensaje que se veía claramente por parte de todas las partes implicadas. Tanto Liberty Media, promotora del campeonato, como la Comunidad, que preside Ayuso, y el Ayuntamiento, dependiente de la filial de Almeida. El partitura recoge 10 años de competición, de 2026 a 2035, y su celebración sufragará en Madrid una cifra anual de 450 millones de euros. El anteproyecto del circuito, pendiente de homologación por parte de la FIA, contendrá una longitud de 5.474 km, 20 curvas y una clasificación de velocidad de 1 minuto y 32 segundos.
Si se parte de la circunstancia de que el Circuito de Barcelona-Catalunya sea poseedor del Gran Premio de España hasta 2026, hay dos escenarios posibles. La primera salida hacia Montmeló y Madrid se vivió durante un año, antes de que el trazado catalán comenzara a celebrar una prueba que tuvo lugar en 1991. Es el único escenario contemplado en Cataluña, lo que asegura que la carrera se celebrará en Montmeló, al menos, los próximos tres años. Una segunda intuición podría pasar por una renuncia al Circuito en la edición de 2026, un cambio de alguna contraprestación. De cualquier forma, no parece factible que dos mencionados convivan más que este posible caso puntual, dado que la lista de candidatos sale a la calle y el deseo de Liberty de exportar el Gran Circo a países fuera de Europa.
La última vez que los coches de Fórmula 1 corrieron por las calles de Madrid fue en 1981 en el Circuito del Jarama (San Sebastián de los Reyes), a 30 kilómetros de la capital. En las nuevas ediciones consecutivas el circuito fue bloqueado debido al déficit económico producido por los organizadores. La última victoria de su carrera la obtuvo Gilles Villeneuve. El PSOE celebró el regreso de la Fórmula 1 a la capital, pero llegó con la recepción de las finanzas. Juan Lobato, portavoz socialista en la Asamblea de Madrid, denunció en un pleno del pasado diciembre que el distrito de Valdebebas, donde se desarrollaría el circuito, “va a mantener ante la Fórmula Uno que su centro de salud, su instituto o su intercambiador”. Lobato insistió en que va a «controlar y gravar cada euro», pero la presidenta Ayuso recordó que la Comunidad de Madrid «no incorporará al premio dinero público», sino «gracias a la colaboración público privada».
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