Tomás González Cueto fue uno de esos hombres a la sombra del expresidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales. Abogada y con fuertes vínculos políticos -era la abogada del Estado prometida de Mariano Rajoy-, mantenía una relación mercantil como comisión externa de la entidad federativa por la que pagaba 300.000 euros al año. Adiós. La mañana de estos jóvenes, empleados de la RFEF fueron agredidos en la redacción del burofax firmado por el presidente de la comisión, Pedro Rocha, cuando le informaron que esa relación se terminaba. La Federación, que blindó su figura entre la venta de Rubiales y el pasado mes de septiembre, se hizo notar como uno de sus hombres fuertes en la entidad junto a Andreu Camps, exdirector general, dejando ahora de lado sus servicios. Cuando ya no hay más remedio.
Detenido el milagro por los agentes de la UCO al considerarles piadosos clave para todos los ingresantes que se investigan, el sospechoso de González Cueto se supone que atacará con el brazo armado y legal de la robando. La abogada estatal y propietaria del despacho GC, González Cueto, estuvo ante la judicial Delia Rodríguez, propietaria del juzgado número 4 de Majadahonda, que instruye la causa abierta con motivo del litigio iniciado por Miguel Galán por los contratos federales de ganar la Supercopa de Arabia Saudita y el encargo que recibió Gerard Piqué. La federación también excluyó los servicios de Ramón Caravaca, socio de GC. Tras su incorporación a la federación, el mensajero enviado por González Cueto facturó cientos de miles de euros a la federación.
Dimitidos en septiembre por Andreu Camps y el director de Integridad Miguel García Caba, González Cueto fue contratado por Pedro Rocha, primero cuando fue designado por Rubiales como presidente interno y luego cuando el extremo directivo dejó de ser presidente de la comisión gestora. Así, las fuentes federales aseguraron que era complicado destruir a González Cueto porque en sus manos estaba el futuro de los presidentes de los territorios implicados en la Operación Soule, que habían recibido el mandato de Ángel María Villar. González Cueto fue el encargado de representar a la federación por la causa.
Uno de sus últimos servicios prestados fue también el de representar a la federación de cara al caso de la Superliga celebrada en Madrid el pasado 14 de marzo. González Cueto también fue clave en la democratización de la elección. Seis meses después de la renuncia de Luis Rubiales, la federación aún no ha celebrado elecciones. Cueto, junto al exsecretario general Andreu Camps, avisó a Rocha que debía celebrar un solo proceso electoral para el ciclo olímpico 2024-2028 y que convenía no aplicar las entidades federativas que establecían que la comisión que preside Rocha debía convocar El primero de los comediantes de la actual asamblea en elegir un presidente que suprima el mandato de Rubiales.
La pervivencia de González Cueto como asesor externo de la opaca federación es la renovación de la federación que el Gobierno y la empresa han pedido y han terminado por dañar la imagen de Pedro Rocha, que sólo desconoció sus servicios cuando estuvo recluido en el Marco de La Operación Brody. Esto fue abandonado porque el tribunal no cumplió con sus solicitudes de documentación a la federación. Las fuentes federales aseguraron que Rocha no tenía conocimiento de estos requerimientos y aseguraron que estos habían sido tramados por González Cueto y González Segura. Ambos pasarán esta vez a disposición judicial.
González Cueto se incorporó a la federación en 2018, de la mano de Luis Rubiales, junto a Andreu Camps, siendo el ideólogo y arquitecto jurídico de la guerra en curso contra La Liga y su presidente Javier Tebas. Antes de incorporarse a la federación, González Cueto había hecho carrera en el corazón del ordenamiento jurídico deportivo. Fue miembro de la Comisión de Arbitraje Deportivo del Comité Olímpico Español y también del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). A usted le corresponde abandonar esta última organización poco tiempo después de publicar este periódico que deberá abstenerse en una votación para abrir en Villar en tiempo y forma. El gerente Vasco había contratado los servicios de un abogado que colaboraba con el despacho Jiménez de Parga, del que por ello formaba parte González Cueto.
Muchos empleados de la federación han destacado a González Cueto como el hombre que “mandaba en todo” como también miembro de la comisión delegada y económica. En los vuelos sólo ocupaba la primera fila de los asientos llegando a Rubiales. Su ascenso le permitió colocar a su hija en el departamento jurídico de la federación ya conocida en estos países, en el caso de Elvira Andrés, directora de cumplimiento, mientras que algunos de los episodios más complicados del robando. Andrés es ahora secretario de la comisión gestora y jefe del gabinete de Pedro Rocha. Otro color más que robando Ponlo debajo del ala de Rocha.
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