El ‘landismo’ como forma de vida | Ciclismo | Deportes

Los ismos —movimientos artísticos, literarios o filosóficos con cierta tendencia a lo efímero— no están al alcance de todo el mundo. Ni formar parte de ellos ni liderarlos. Muchas veces se lideran desde lo cotidiano. Una personalidad peculiar, que se salga de la norma y a la que acompañen con la necesaria regularidad momentos felices y trágicos, por ejemplo. Alguien que abrace a menudo el concepto de casi y que lo haga de tal manera que —casi— parezca mejor que lograr gran éxito. Muchas veces ni las personas que lideran esos ismos ni las personas que lo forman son conscientes del calado del movimiento hasta que sucede algo que lo consolida. El ciclista Mikel Landa despertaba pasiones en un sector de la afición. En 2017, cuando esos hinchas se organizaron bajo la etiqueta #FreeLanda (Liberad a Landa) para expresar el sufrimiento que les generaba verlo trabajar en el Tour para la victoria de Chris Froome —por aquel entonces jefe de su equipo, el Sky—, el landismo se consolidó como concepto y como forma de entender el ciclismo.

Landismo (Libros de Ruta), es el título del libro en el que 12 firmas —de periodistas, de escritores, de ciclistas— exponen su manera de entender este ismo, surgido en torno a la figura de un ciclista que ha logrado dos terceros puestos en el Giro y dos cuartas posiciones en el Tour. Arranca el manual con una propuesta de genealogía del movimiento a cargo de Ander Izagirre. Desde Alfred Faure y Jean-Baptiste Dortignacq en 1904 —definitivamente eran otros tiempos— a Raymond Poulidor, que durante quince años cortejó el triunfo en el Tour —tres veces segundo, cinco tercero— pero nunca vistió el maillot amarillo. Ni una jornada. Los textos de Peio Ruiz Cabestany, Marcos Pereda, Marc Cornet, Txani Rodríguez, Ana Rosa Gómez Rosal, Guille Ortiz, María Sirvent, Ramón Espinar, Peio H. Riaño y Elena Alcalde proponen un original y audaz recorrido por el movimiento. Se cierra el libro con una explicación del amor por Mikel a cargo del periodista Carlos Arribas, que ofrece más de 100 razones. La penúltima: “Porque nunca ganará el Tour, el Giro o la Vuelta”. La última: “Porque la derrota es el estado natural de la persona”.

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By Bixintxo Armendáriz Campos

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