Manuel Pellegrini, el entrenador del Betis que sigue sin ganarle al Atlético, y ya van 11 partidos, había afirmado en la víspera que el conjunto madrileño le parecía el de mejor plantilla de toda la Liga. El presunto arsenal del Atlético no se vio en el Benito Villamarín. Los de Simeone, que fueron superados en el primer tiempo, realizaron después un tremendo ejercicio de impotencia. El mal partido de Griezmann fue, sin duda, el mejor exponente de la sequía futbolística del Atlético. Puede que fuera por el calor o puede que fuera por las bajas, pero el Atlético fue un equipo muy ramplón en el Benito Villamarín. Al Betis le valió el empate a cero, pues también tenía muchas bajas e incluso todavía tiene a jugadores sin inscribir, caso de Bartra o Bellerín. Sin Fekir ni William Carvalho, además de Luiz Henrique, sacar cuatro puntos en dos choques contra Villarreal y Atlético es un buen bagaje.
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Rui Silva, Sabaly, Luiz Felipe, Abner, Pezzella, Ayoze Pérez (Guardado, min. 83), Guido Rodríguez, Marc Roca, Aitor Ruibal (Juan Cruz, min. 72), Isco (Rodri, min. 72) y Borja Iglesias (Willian José, min. 62)
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Oblak, Carrasco (Samuel Lino, min. 64), Mario Hermoso, Witsel, Azpilicueta, Savic, De Paul (Rodrigo Riquelme, min. 79), Lemar (Morata, min. 64), Marcos Llorente (Pablo Barrios Rivas, min. 45), Depay (Saúl, min. 63) y Griezmann
Goles
Árbitro Ricardo de Burgos Bengoetxea
Tarjetas amarillas Aitor Ruibal (min. 37), Savic (min. 42), Isco (min. 50) y Simeone (min. 53)
Los de Simeone deben mejorar. Su juego estuvo lleno de imprecisiones, con una ausencia absoluta de ritmo. Solo Barrios le dio algo de aire en la segunda mitad. Muy poco para un aspirante al título cuando parecía que había encontrado la senda del buen juego. Dice muy poco del Atlético, y también mucho del Betis, que fuera incapaz de hacer una ocasión clara de peligro a lo largo de todo un encuentro que jugó con poca personalidad y, sobre todo, sin ese talento que se le presupone.
“Tenemos más tranquilidad para jugar. No tenemos la pelota, necesitamos tenerla, se la estamos dando”, afirmaba Simeone durante la primera pausa de hidratación, con el Benito Villamarín, muy festivo, convertido en una auténtica sauna. El Atlético, realmente, no es que no tuviera el balón en una primera mitad de lo más discreta, es que fue un equipo vulgar y sin carácter. El Betis fue el dueño del juego desde el primer minuto y ya en el segundo Abner estuvo a punto de marcar. Más concentrado y con una marcha más, este Betis de Pellegrini dominó casi todas las facetas del juego, menos la más importante, la del gol. Bien asegurado por el doble pivote Guido-Marc Roca, más las pinceladas de Isco, los de Pellegrini fueron superiores.
Nunca le quemó el balón al equipo verdiblanco, mientras que el Atlético, demasiado contemplativo, se limitó a defenderse con cierto orden. No obstante, es complicado hincarle el diente al Atlético a pesar de su escasa producción en ataque. Tiene oficio y el Betis apenas entró en el área rival. Sí puso marca el activo Ayoze con un gran disparo desde fuera del área que rozó la escuadra.
El Atlético no tenía nada. Griezmann y Memphis, titular por Morata, no la olieron en una primera mitad deficiente. El Betis, mejor, no marcaba, con muchos ojos en la grada puestos ya en un Borja Iglesias demasiado fallón. No obstante, este tipo de partido ya lo habían visto muchas veces los aficionados verdiblancos. El Atlético, de la nada, casi siempre había tenido en otras ocasiones la capacidad para golpear al Betis.
Al Atlético se le iluminó algo la cara con la entrada de Barrios. Es un futbolista de calidad, con desparpajo, con esa osadía del que se siente elegido. Con Llorente fuera, el equipo de Simeone mostró una mejor cara, aprovechando también el cansancio del Betis, menos fresco que en la primera mitad. Sin embargo, la primera ocasión, como en casi todo el partido, fue para el Betis. Ayoze lanzó desde fuera del área y el balón volvió a salir fuera.
En el minuto 65 llegó la primera opción del todo el choque para el Atlético. Un remate de Hermoso, que mantuvo un buen duelo con Ruibal, lo sacó con ciertos apuros Rui Silva. El tramo final del choque fue insufrible. Entre el calor y la falta de chispa de los futbolistas, el juego fue de escasa precisión y muy trabado. El Betis, que perdió con los cambios, ya no encontró con tanta facilidad el área del Atlético. Poco a poco se fue conformando con el punto. Realmente ya no tenía ni fuerzas ni calidad para otra cosa. Acabó con 10 jugadores por la lesión de Abner y con Guardado en el lateral zurdo durante los seis minutos de descuento. Aguantó el Betis y se llevó el empate.
“El Betis fue mejor en el primer tiempo. La primera parte nuestra fue muy mala. Mejoramos mucho en la segunda parte y tuvimos alguna situación en ataque. Me quedo con ese segundo tiempo”, afirmó Simeone a la conclusión del choque. Betis y Atlético llegan a la tercera jornada con cuatro de seis puntos.
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