Barcelona a pesar de Xavi Hernández. Un mes después de que el presidente Joan Laporta se enfrentara públicamente al técnico catalán para celebrar hasta las últimas semanas su continuidad en el club hasta junio de 2025, la entidad azulgra ha puesto el punto definitivo a la edad de Xavi en el banquillo del primer equipo. El desgaste ya no era sólo político, sino también futbolístico: había un mensaje institucional heterogéneo y el equipo alimentaba muchas de las expectativas creadas por el consistorio, pero también por su propio entrenador. Hoy, según fuentes del club, no se ha podido definir el impacto económico del ascenso técnico, que poco después de conocerse su ascenso digo a través de tus círculos sociales: “No es fácil entrar en el club de tu vida, pero estoy muy orgulloso, después de dos años y delante de un vestido que es como una segunda familia”. Al principio el coste del envío a Xavi ya sube personal El técnico son 20 millones, mal negocio para un club que va con las tarjetas rojas y que tiene que cuadrar exactitud financiero para incorporar a su nuevo delantero, Hansi Flick.
“No hay garantía legal de que Xavi perdone el finiquito de dinero. Hablamos con los abogados y les comunicamos que sus declaraciones públicas no eran suficientes”, aseguran desde la cúpula de Barcelona. Sucede que la desconfianza de Laporta y su entorno con Xavi no eran nuevas. “¡Ojo!”, advierten las mismas fuentes; “Jan le tendrá mucho aprecio.” Sí, definitivamente, seguro mar. De hecho, cuando el día 27 del mismo mes el excapitán del primer equipo anunció su despedida sin la bendición pero con el visto bueno del club de fútbol, Laporta se limitó a: “Si no hubiera sido Xavi, le hubiera echado”. No lo contraté porque era el entrenador de Xavi hasta que grabó el récord de Xavi.
A excepción de Rafa Yuste, los directivos del Barcelona (los que están y los que no) siempre han tenido el coste de saludar la figura de Xavi en privado. El primer tema fue aquel en el que fue el hombre orquesta —una suerte de directivo del fútbol inglés— de Víctor Font, rival de Laporta en las elecciones de 2021, hasta que cambió el anuncio. “Si Dios sabe lo que hacía Jan”, aseguran, entonces, desde la Junta de Laporta. El mismo presidente aseguró públicamente que no estaba preparado para el banco azul: «Sin experiencia, debe empezar en la sucursal». La falta de rodaje de Xavi, sin embargo, no le impidió utilizarle como escudo para sustituir a Ronald Koeman en noviembre de 2021. Fue en ese momento cuando detectó un problema que, según la cúpula del club, Xavi le persiguió durante su caso de tres años al frente del primer equipo: “No le cambié el chip de jugador al de entrenador. Seguir pensando como un futbolista.»
Su virtud sobre el césped, según sus fuentes, era su defecto como entrenador: “Parece que va para aquí y luego va para allá. Estás actuando como una pelopina. Realmente no sabes lo que piensas, a veces te preguntas cosas o jugadores que antes habías elogiado y el revés. «Estoy mirando el caso Cancelo, por si por ellos empezamos una guerra con el City y Guardiola y ahora no quiero». Este mensaje fue bien recibido sobre su forma de servicio y gestión del equipo, lo que influyó en muchas decisiones de la comisión de fútbol. En el último Verona, por ejemplo, con la fuerza de ser el vigente campeón de La Liga, Xavi perdió la batalla de Joao Félix (no lo quería y llegó) y de Zubimendi (lo quería y no llegó). Un mes después, en diciembre, Xavi acordó cambiar la convocatoria del partido de Liga de Campeones ante el Amberes por orden del club.
El cansancio ya había empezado a ser evidente. El técnico ha perdido fuerza en el club al mismo tiempo que su equipo se ha debilitado sobre el terreno de juego. “Sí, no gano nada me voy”, aconsejó. Mientras se acaba un día más, no puedo disimularlo más: “Es cruel y desagradable ser entrenador en el Barcelona”, confesó Xavi el día en que anunció su anticipada despedida. Fue por el hecho de que el entrenador dijo que se puso en marcha cuando el equipo empezó a ganar dinero. “El equipo ha mejorado por lo que me dijo”, asumió Xavi. Es en este periodo cuando comienzan las nuevas versiones. Mientras en el entorno del técnico aseguraban que Laporta vendería a Xavi que cumpliría contrato hasta 2025, en el club aseguraba que era el entrenador del pediatra Quedarse. Las dos versiones coinciden con aquellas en las que Xavi organizó un encuentro con Deco en la Ciudad Deportiva que acabó en una cena conocida como la noche del sushi en casa de Laporta.
Sí, de nuevo, dos historias diferentes. “¿Confías en la plantilla?”, le preguntó Laporta. “Sí”, respondió Xavi, siguiendo los regalos. Y, en público, el técnico dijo: “Vengo con fuerza y capacidad”. Sin embargo, el técnico del Barcelona asegura que en aquel encuentro pidió a la dirección deportiva “cuatro o cinco refuerzos”. Una filtración que dejó constancia en el teclado, sobre todo después de haber escuchado un mensaje realista del entrante catalán antes de meditar en Almería: “El culé debe entender que la situación es muy complicada y que no debe ver con la de hace 25 años . Ahora bien, el formador no puede preguntar ‘esto, esto y esto’. El objetivo está cambiando, sí no, esperaremos lo mismo”. Fue esa prisa por informar lo que alertó a los detractores de Xavi en la comisión de fútbol. “¿Este equipo será mejor en el futuro si Xavi sigue?”, preguntaron a Laporta; “bien, entonces no te sientes así”.
El presidente finalmente tomó la decisión: despedirse de Xavi. Pero surgió un nuevo problema: cómo y cómo comunicarlo. La semana pasada, el técnico quiso encontrarse con Laporta. No puedo, solo cambié un par de mensajes. Se encontró en Victoria ante el Rayo. “Celebra quedar segundos”, si la alta dirección preguntó en privado, tras una breve reunión en Montjuïc en la que quedaron esta semana. El área de comunicación del club, sin embargo, tiene otros planes: aplazar el anuncio hasta la próxima semana. “No hay necesidad de eclipsar la fiesta femenina”. Una decisión que se juzgó después de que Laporta pasara unas horas ingresado en el hospital por una neumonía.
Según la fuente de la directiva, Xavi insistió y persistió en la reunión, sobre todo después de leer en la prensa que el Barça ya había atacado a Hansi Flick. “Hasta persuió en el Hospital”, Subrayan. Laporta accedió a encontrarse con estos jugadores en la Ciudad Deportiva. “Las filtraciones…”, intentó razonar Xavi cuando Laporta le interrumpió. “No hablemos de estas cosas”. En la reunión conocieron a Deco, Yuste y los colaboradores de Xavi, Oscar Hernández y Sergio Alegre. “Hacía frío pero sin tensión”, explica uno de los presentes. No tienes que volver otra vez. Xavi liderará su último partido en Sevilla. Tras ganar un campeonato y una Supercopa, el Barcelona se fue por la puerta grande, lo mismo hicieron Lionel Messi y Ronald Koeman, víctimas también de la segunda etapa de Laporta al frente del club.
Puedes seguirlo en EL PAÍS Deportes en Facebook Sí Xo escribe aquí para recibirlo nuestro boletín semanal.