La Contralora General de la República, Anel Flores, afirmó que “nadie está aquí para encubrir a nadie” y aseguró que se realizará una investigación exhaustiva sobre el escándalo relacionado con las ayudas económicas otorgadas por el Ifarhu durante la administración anterior. Flores resaltó que su objetivo es tener un caso real y no solo mediático.
En su declaración, destacó que las investigaciones no tienen como objetivo enjuiciar a nadie, sino que permitirán que los involucrados ofrezcan una explicación de las acusaciones que enfrentan, bajo la supervisión del Ministerio Público.
Flores también anunció que próximamente se reunirá con Jaime Díaz, director del Ifarhu, y Roxana Méndez, directora de Descentralización, para tratar los casos de ayuda económica y descentralización que beneficiaron a varios consejos comunales del país. Asimismo, aseguró que si estas instituciones requieren apoyo adicional de la Contraloría, se les brindará el personal necesario para avanzar en las investigaciones de presunta corrupción.
Por su parte, el contralor saliente, Gerardo Solís, resaltó la necesidad de aclarar las ayudas económicas, al señalar que el escándalo surgió en mayo de 2023, en el contexto de una campaña política. Solís dijo que algunos intentaron “prestigiar a jóvenes estudiantes con fines políticos, y parece que les funcionó”.
Sobre los sobrecostos en proyectos ejecutados por la administración anterior, Solís aseguró que los ciudadanos pueden tener la plena confianza de que las obras estatales se están ejecutando a precios justos, gracias a una nueva unidad de análisis de costos creada por la Contraloría, integrada por profesionales especializados en presupuestos de construcción.
Estas declaraciones las dio durante la primera reunión de transición entre el contralor saliente Gerardo Solís y la nueva contralora Anel Flores, que se desarrolló este lunes en la sede de la Contraloría General de la República, en un clima de críticas hacia la actual Contralora.
